La insoportable levedad del ser

Mariano Rajoy ha logrado aupar al Partido Popular en las encuestas después de participar en el foro La Toja y ofrecer una de sus peculiares declaraciones, quejándose esta vez de los nuevos tapones de las botellas de plástico. «Hace un mes estaba con una botellita de estas y veía que no podía, no había manera de quitar esto. Empecé a beber, me puse hecho un circo», aseguró el expresidente. Minutos después, la ventaja de los populares sobre el PSOE en estimación de voto alcanzaba casi los cinco puntos porcentuales.

«Es una pena que mi madre muriera en una residencia madrileña durante la pandemia porque se hubiera descojonado con esta nueva ocurrencia», admitía uno de los encuestados en el último barómetro, prometiendo su voto para el PP aunque en los últimos comicios votara a Pedro Sánchez. «La socialdemocracia está bien, pero echo de menos al vecino y al alcalde», señalaba.

Desde la sede de Génova, la directiva del PP intenta convencer al expresidente para que participe en más foros y debates públicos. «Queremos que le cuente a la ciudadanía los problemas que tiene para reciclar el cartón, o lo difícil que es saber si algo es de cristal o de vidrio», confirmaban desde el partido.

«Cuanto peor hable, mejor el nuestro beneficio político», insisten desde el PP.